Por primera vez desde su llegada a nuestro país en la misma década que Burger King, Kentucky Fried Chicken ocupó el tercer puesto en términos de consumo entre las principales cadenas organizadas de restauración de nuestro país, tradicionalmente dominado por Telepizza.
Con el 6,4% del gasto de la industria, según datos de la consultora Circana, la franquicia de pollo frito estilo KFC ingresa al Olimpo de las franquicias de comida rápida después de dos grandes marcas de hamburguesas de ternera que dominan el mercado desde hace décadas en el país.
Desde Coronel Sanders también señalan que es la primera vez que una marca centrada en el pollo se infiltra en una plataforma dominada por las tradicionales franquicias de hamburguesas de ternera y el especialista español en pizzas a domicilio.
Tras mantener un lento ritmo de crecimiento y centrarse en importantes recursos de capital, desde 2018 los directivos de KFC han redoblado sus esfuerzos en el mercado español para duplicar su presencia y llegar a aproximadamente 289 restaurantes existentes tras abrir cerca de un centenar de nuevos puntos de venta.
Según la compañía, este crecimiento se produce con unas expectativas de ingresos este año superiores a los 400 millones de euros.